Sobre la realidad y la solución...

Vivimos en un país en el cual la ciudadanía no tiene por que preocuparse al salir a la calle de noche, donde los niños pueden jugar sin temor en los parques y donde las madres no tienen por que preocuparse siquiera de cerrar la puerta...

Existen dos posibilidades mi estimado lector, la primera sería una incrédula cara de enojo presta a esbozar los más certeros argumentos para desmentir tan enorme falacia, o dejar escapar el suspiro propio de aquel que por un segundo vio pasar una quimera.

Compañero lector, en este país existe una de las mayores tasas de delincuencia a nivel global, y específicamente en la región que nos atañe, el Estado de México existen una serie de problemas que evitan que nuestra gente que tiene deseos de superarse para así poder crecer pueda lograr su meta de bienestar social y equidad de circunstancias.

Los indices delictivos van en aumento, los asaltos a mano armada, los secuestros, el robo al autotransporte. Existen muchas soluciones para terminar con todos estos problemas que nos aquejan; La creación de áreas verdes para fomentar el deporte, los espacios de expresión artística y cultural, el desarrollo educacional, la apertura de escuelas y poder asegurar que los habitantes sean capaces de continuar sus estudios, todo esto debería de ser posible y no sólo palabras al aire. Las autoridades deben de ser capaces de brindar los recursos necesarios para la creación de estas herramientas básicas para poder controlar la delincuencia de una vez por todas, erradicándola por medio del bienestar social, proveyendo a nuestra gente con los medios para superarse sin necesidad de delinquir.

El mayor problema que enfrenta este gran estado es la corrupción, en todos los niveles, en todas las esferas; diariamente nos encontramos con la ineficiencia y la inequidad en todos los espacios. Estamos hartos de funcionarios corruptos, de mordidas, de retrasos en procesos que no tienen justificación.

El Partido Socialdemócrata ofrece una solución en el combate contra la corrupción que tanto nos contiene, donde los servidores públicos sí cumplen su función de apoyar al pueblo, sin trabas ni mordidas, en un ambiente de honestidad y bienestar social para poder terminar definitivamente con la delincuencia y así regresarle la inocencia a nuestros niños y la tranquilidad a todos.

¡PSD, que nadie quede fuera!

Oswaldo Moscoso